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Siguiendo con la serie de publicaciones sobre programas de entretenimiento en hoteles de ultralujo, hoy quiero hablarte sobre un programa inspirado en los valores de la Ocean Futures Society, fundada por Jean-Michel Cousteau. Este es un programa increíble en un Kids Club de playa que ha impactado a muchas familias en Baja California.
Experiencias en Kids Club de playa enfocadas en la apreciación del entorno
Cuando llegué al Ritz Carlton, este programa ya estaba en marcha y funcionaba tan bien que se llevó a otras áreas donde era necesario, en especial en aquellos lugares con gran biodiversidad. ¿En qué consistía? Eran actividades lúdicas y educativas diseñadas para que los niños y sus familias conectaran con la naturaleza. Cada actividad estaba pensada para que los más pequeños pudieran aprender sobre conservación y el entorno, siempre de una manera divertida y memorable.
Una de las actividades favoritas de los niños era examinar el krill de San José del Cabo, ese mismo que comen las ballenas. Ver cómo los pequeños se sorprendían al observar estos diminutos organismos bajo el microscopio era invaluable. Les proporcionábamos enormes libros llenos de datos sobre macroinvertebrados para que, de manera casi mágica, comenzaran a relacionar lo que veían con nombres científicos.
Recuerdo que uno de los momentos más gratificantes era cuando las caras de los niños se iluminaban al descubrir algo nuevo.
«Las caras maravilladas al darse cuenta de que lo que observan en el microscopio tiene nombre, apellido, género y especie, no tiene precio».
El objetivo era que aprendieran sin darse cuenta, como si la naturaleza misma fuera su aula. ¡Y funcionaba! Tanto, que al día siguiente venían los padres a participar también en las actividades.
El éxito de este programa no se limitó a los niños. Gracias a su entusiasmo, muchas de las actividades se transformaron en experiencias familiares. Llegaban los padres, y más tarde los adultos solos, pidiendo experiencias personalizadas en torno a la naturaleza.
Actividades en Kids Club de playa enfocadas en largas estancias
Uno de los desafíos más interesantes fue trabajar con niños que pasaban largas temporadas en las residencias del hotel. Como responsables de Kids Club impulsamos la participación de los niños en el desarrollo de actividades, así nació el famoso «asquero-laboratorio», un espacio donde buscaban respuestas a las preguntas más curiosas y, a veces, algo no tan agradables. Por ejemplo, el análisis de la saliva de caracoles y la comparación con la propia o algo más simple como buscar pequeños organismos vivos en charcos.
El microscopio se convirtió en el rey de estas actividades, mantenían a los niños entretenidos, curiosos y reflexivos, siguiendo cada paso del método científico sin que se dieran cuenta de que estaban aprendiendo algo.
También trabajábamos con materiales naturales para crear cosas de uso cotidiano. Un proyecto muy popular fue elaborar pegamento con nopales. Los niños analizaban las texturas, comparaban materiales y, sin que yo tuviera que decírselo, iban descubriendo las propiedades y el porqué de cada ingrediente, casi como un pequeño experimento.
A lo largo del tiempo, me di cuenta de que no se trataba solo de entretenimiento, sino de educar a las nuevas generaciones sobre la sostenibilidad. La hotelería está cambiando, y la sostenibilidad no es solo una cuestión operativa, también involucra a los huéspedes en experiencias más conscientes. De hecho, los niños son quienes, muchas veces, lideran este cambio.
Recuerdo un grupo de niños de Ciudad de México que, a pesar de haber visto cientos de documentales sobre vida silvestre, nunca habían visto un hormiguero en persona. Ver su fascinación al observar algo tan común en la naturaleza me hizo reflexionar sobre cómo incluso las experiencias más simples pueden tener un gran impacto.
Por último, quiero destacar la importancia de tener cuidado en las interacciones con la naturaleza. Aunque los videos de TikTok puedan mostrar lo contrario, los animales no están ahí para crear contenido. Cuando trabajas con niños, la precaución es clave.
