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Para entender un poco más esta nota, cuando hablamos de ciudades inteligentes damos por hecho que intervienen dos elementos básicos que ya no es necesario mencionar: internet y dispositivos IoT. No existe ciudad inteligente sin alguno de estos dos jugadores.
Del inicio de la era industrial al día de hoy, el mundo ha incrementado su temperatura 1.2 °C y seguirá en aumento si los gobiernos de las ciudades más contaminantes no hacen algo al respecto. Las consecuencias ya son devastadoras, la tendencia no cambia y el tiempo avanza sin detenerse, Nueva York lo sabe y por ello ha realizado cambios importantes con el programa de aceleración para ciudades inteligentes.
Nueva York enfrenta con tecnología la contaminación ambiental
La prioridad de la ciudad de Nueva York es reducir la contaminación del aire y solucionar otros problemas que aquejan a la ciudadanía. Con esto en mente, el programa acelerador de ciudades inteligentes de Nueva York decidió hacer más sencillo el proceso de evaluación de tecnología en ascenso que busca mejorar la calidad de vida de los neoyorkinos.
Ahora las agencias de la ciudad, empresas privadas e instituciones podrán evaluar un máximo de ocho proyectos pilotos al año antes de decidir si se ponen en marcha o no.
«En Nueva York, es donde los innovadores tecnológicos de todo el mundo vienen a convertir sus grandes ideas en la próxima gran innovación. El programa Smart City Testbed de Nueva York presenta una emocionante oportunidad de colaboración entre empresas y agencias de la ciudad en proyectos de vanguardia que aprovechan las tecnologías de Smart Cities, para crear un futuro mejor y más equitativo para todos los neoyorquinos. Esperamos las innovadoras asociaciones y soluciones que este programa inspirará en los próximos meses y años». Dijo Matthew Fraser, director de tecnología de la ciudad de Nueva York.
Proyectos de mejora para la ciudad de Nueva York
A partir de ahora el programa recibirá las solicitudes de forma continua, en especial aquellos que se centren en mejorar los espacios públicos de la ciudad. Cada trimestre se hará la selección de dos programas para abrirles la puerta a los activos de la ciudad de Nueva York, brindarle apoyo técnico y orientación administrativa.
Mientras el proyecto piloto esté activo, las agencias de la ciudad y los neoyorquinos brindarán su retroalimentación sobre el beneficio que generan. Cada organización seleccionada tendrá que cubrir el financiamiento de sus proyectos durante un periodo de 6 a 9 meses que dura la prueba.
Drones para identificar emisiones de gases de efecto invernadero
Uno de los proyectos enfocados en el monitoreo de la calidad del aire destaca entre las propuestas por el uso de drones, tecnología y robótica que se unen para detectar fallas en edificios (paredes exteriores y techo) que contribuyan a la emisión de gases de efecto invernadero.
Por otro lado y como parte de la prioridad #1 a resolver, se explora el uso de dispositivos IoT para la reducción de partículas contaminantes en el aire y mejorar su calidad.
Para detectar posibles fallas a futuro en la estructura de los edificios, el proyecto con drones aplica el uso de la visión por computadora, imágenes térmicas, radar a través de paredes, tecnología de UAV/drones, localización y mapeo de robots.
Uno de los proyectos incluidos en el Testbed enfocado en la mejora y monitoreo del aire es el resultado de la colaboración entre la Oficina de Tecnología e Innovación de Nueva York, el Departamento de Salud y Salud Mental de la Ciudad de Nueva York (DOHMH) y socios privados
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