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El icónico servicio de llamadas y videollamadas por internet, Skype, dirá adiós de manera definitiva el próximo 5 de mayo de 2025. Microsoft, propietario de la plataforma desde 2011, ha decidido cerrar el servicio para centrar sus esfuerzos en Teams, su herramienta de comunicación empresarial y colaborativa. Con esta decisión, los usuarios de Skype tienen un plazo de diez semanas para decidir qué hacer con sus cuentas y datos.
Un cierre anunciado, la caída de un gigante: Adiós a Skype
Skype mejoró la forma en que nos comunicamos cuando fue lanzado en 2003. En sus mejores años, alcanzó un impresionante pico de 300 millones de usuarios, convirtiéndose en sinónimo de llamadas por internet. Sin embargo, con el tiempo, la llegada de nuevas tecnologías y aplicaciones de mensajería como WhatsApp, Zoom y Microsoft Teams comenzaron a eclipsar su relevancia.
Microsoft ya había dado pistas sobre la disminución de Skype al lanzar en 2015 una versión empresarial del servicio, para luego enfocar sus esfuerzos en Teams desde 2016. En 2021, Teams fue designado como la aplicación de comunicación por defecto en Windows 11, dejando a Skype en un papel secundario. Finalmente, en diciembre de 2024, Microsoft dejó de permitir la compra de créditos y números de teléfono en Skype, sellando así su destino.
Migración a Teams: última oportunidad para los usuarios de Skype
Hasta el 5 de mayo, los usuarios de Skype podrán transferir sus contactos y conversaciones a Microsoft Teams o descargar su información a través de la herramienta de exportación de datos de Skype. Microsoft asegura que los créditos restantes de los usuarios podrán seguir utilizándose en un marcador de Skype dentro del portal web y en Teams, pero ya no será posible adquirir más saldo ni renovar suscripciones telefónicas después del 3 de abril.
El mensaje es claro: Microsoft ha decidido enfocar todos sus esfuerzos en Teams, justificándolo con el crecimiento del servicio, que en los últimos dos años ha cuadruplicado su volumen de llamadas de usuarios. Con 320 millones de usuarios, Teams ha demostrado ser la apuesta ganadora de la compañía.
El fin de una era: ¿innovar o desaparecer?
Skype fue un pionero en la comunicación digital, dando paso a una nueva forma de interactuar a través de la web. Sin embargo, el avance de la tecnología ha demostrado ser implacable. La incapacidad de Skype para adaptarse rápidamente a los cambios del mercado y la falta de integraciones modernas fueron factores clave en su declive. Mientras que WhatsApp superó los 2 mil millones de usuarios en 2020 y Zoom se consolidó como la herramienta predilecta en la pandemia, Skype se quedó rezagado.
La decisión de Microsoft de apostar por Teams responde a las necesidades actuales de un mundo hiperconectado, donde las herramientas de comunicación deben ser integradas, versátiles y adaptadas tanto al entorno empresarial como al personal. Aunque la transición de Skype a Teams puede parecer lógica desde una perspectiva empresarial, para muchos usuarios representa la pérdida de una plataforma que, en su momento, revolucionó la manera de conectarnos con el mundo.
El cierre de Skype es un recordatorio de cómo la tecnología avanza dejando atrás a quienes no logran evolucionar a su ritmo. Hoy despedimos a una plataforma que marcó una era, con un sentimiento de nostalgia por lo que alguna vez fue y con la certeza de que la innovación no se detiene. Adiós, Skype. Gracias por las llamadas interminables, las reuniones inesperadas y los momentos compartidos a través de una pantalla.